Rene Orlando Chavarria: enero 2020

sábado, 4 de enero de 2020

EL CINE CLASE "B"

El cine de clase B es fácilmente reconocible; posters estrambóticos que suelen mostrar tres elementos comunes: un hombre en actitud heroica y de macho alfa, una mujer con poca ropa a merced de un gran peligro y una figura amenazante de fondo (esta última podría ser un invasor de espacio una bestia, un robot fuera de control, monstruos, etc). Estas historias generalmente eran de baja calidad artística. Entonces, ¿Por qué se filmaban estas películas?

Si había películas clase B, obviamente existían las de clase A, aquellas creadas con buen presupuesto como para cubrir las gastos mínimos de su producción.

La gran depresión de fines de los años 20 y principios de los años 30 también afectó la industria cinematográfica. El público tenía mucho menos dinero para el ocio y esparcimiento concurría menos a los cines. Para aumentar la recaudación, se recurrió a funciones con dos películas. La principal y la película "B", que era de relleno y generalmente no tenía publicidad y los críticos las ignoraban. Así es como nació el cine clase "B".

Las películas de clase "B" se filmaban con muy bajos presupuestos, guiones escritos por aficionados o principiantes y hasta con cámaras de baja calidad.

Los grandes actores no querían participar en esos filmes para no afectar su prestigio, entonces se recurría a actores novatos, muchas veces sin talento.

Los efectos visuales se improvisaban y hasta se usaban escenas de otras películas muchas de ellas de descarte. Todo era válido para cumplir el objetivo de terminar en tiempo y costos el relleno que acompañara una película principal y que la gente se viera tentada a pagar para ver una función doble. Aunque parezca mentira este panorama trajo consigo trabajar con menor censura y libertad creativa.{{{

Los temas mas populares fueron: vaqueros, ciencia ficción y terror.

Y eso era fácil de entender. Importaba mas el espectáculo que el argumento, muchas veces sostenido por guiones rechazados. Y cualquier propuesta era aceptada si se podía filmar por pocas monedas.

Esto duró hasta los años 50s, cuando se encontró que los grandes estudios de los Estados Unidos violaban la ley antimonopolios al filmar, distribuir y exhibir sus filmes. La doble función era parte de este esquema, por lo cual se abandonó y el cine clase "B" dejó de ser interés para las empresas cinematográficas.

Años después fue retomado por cineastas interesados en contar historias sin las restricciones del circuito principal. El menor apego a las reglas dio lugar a relatos eróticos y de mayor violencia. Este tipo de cine no se preocupa por simular el cuidado en los detalles ni actuaciones. La película Plan 9 del Espacio Sideral del director Ed Wood es la abanderada del cine clase "B".